7. MARCO TEÓRICO - PRIMERA PARTE

A través del tiempo han surgido movimientos culturales regidos por una serie de características que permiten diferenciarlas, dentro de ellas se puede resaltar que el estilo junto con sus derivados tales como el lenguaje, la estética, las producciones artísticas, el manejo gráfico y/o simbólico, así como la música, en donde ésta última juega un papel primordial dentro de aquellos jóvenes que se identifican con algún genero en especial; determinan a su vez todo un patrón de comportamiento e ideología que de una u otra forma consigue que el “joven” adopte cierto estilo de vida formando parte entonces de lo que se conoce como culturas juveniles o urbanas, “en un sentido amplio, las culturas juveniles se refieren a la manera en que las experiencias sociales de los jóvenes son expresadas colectivamente mediante la construcción de estilos de vida distintivos, localizados fundamentalmente en el tiempo libre, o en espacios intersticiales de la vida institucional” 1. Teniendo en cuenta lo mencionado anteriormente puede decirse que las experiencias de los jóvenes con su entorno y la forma de vivir sus tiempos libres permiten la construcción de una identidad propia y así su manifestación a través de distintas expresiones culturales, sin embargo estará influenciada por los agentes de la “cultura juvenil” a la que pertenezca.

Dentro de la formación integral de los jóvenes se encuentra su derecho al libre desarrollo de la personalidad y su libre expresión, en esta última el joven puede acceder a distintas formas de dar a conocer su interior como ser humano; la música en la actualidad se concibe como una forma en la que principalmente los jóvenes encuentran un “escape” en su diario vivir, un medio por el cual salen a flote sus sentimientos, pensamientos y formas de concebir al mundo y a sus semejantes, de igual manera un medio para guiar su vida a través de un estilo marcado por la misma, aquí juegan un papel fundamental elementos tales como: el vestuario y su tendencia de color, el maquillaje, el peinado, los accesorios, y por que no: la expresión verbal (vocablos específicos en una cultura) así como un conjunto de expresiones gráficas y simbólicas propias de cada cultura; por ello al momento de darse el “encuentro musical” salen a relucir todos los elementos antes mencionados, con el fin de sentirse dentro y parte de la misma. Podría decirse que a través de la evolución del ser humano y en el nacimiento y desarrollo de las culturas a través del tiempo, es la música la que se ha convertido en un lenguaje universal que nos permite comunicarnos con los demás sin hacer distinción alguna de raza, creencias, sexo, edad, etc. y así llegar a sentir que todos pueden ser parte de un mismo núcleo sin importar las diferencias, tan solo sentir la conexión de la música con el ser y con el entorno.

1. Feixa, Carles. De Jóvenes, bandas y tribus. Antropología de la juventud, Capítulo III. Editorial Ariel, S.A. Barcelona, 1999. Pág. 1. Pár. 1. Lín. 1, 2, 3, 4.